Arquitectura residencial para personas mayores dependientes
Javier Gallego
arquitecto_ www.habilitec.com
El modelo residencial actual en la comunidad autónoma de Galicia está aún lejos de las tendencias internacionales en diseño de residencias centradas en el envejecimiento activo o de éxito.
En las últimas décadas la sociedad ha experimentado grandes cambios sociales, culturales y económicos. La familia tradicional nuclear ha dado paso a nuevos modelos de familia donde, en muchos casos, la persona mayor termina envejeciendo sola. Sin embargo, el aumento en la esperanza de vida ha permitido a las personas mayores, en estos años de vida adicionales, emprender nuevas actividades, como estudios o antiguas aficiones, sin dejar de hacer aportaciones de gran valor a su familia y su comunidad. A pesar de ello, hay un factor que condiciona en gran medida las posibilidades de realizar estas actividades: la salud
En la actualidad el concepto de envejecimiento saludable que propone la Organización Mundial de la Salud para el siglo XXI ha sido el de Envejecimiento Activo, que considera no solo los indicadores de salud física, sino también los aspectos psicológicos y sociales, adquiriendo una especial relevancia el entorno en el que vive la persona mayor.
Existe una valoración negativa asociada a los centros residenciales para personas mayores relacionada con aspectos como el ambiente hospitalario o la pérdida del significado vital. El modelo residencial hoy en día, en la comunidad autónoma de Galicia, está aún lejos de las tendencias internacionales en diseño de residencias centradas en el envejecimiento activo o de éxito.
La creación de un entorno amigable parece ofrecer respuestas a algunas de las cuestiones planteadas, siendo el diseño arquitectónico una de las herramientas que pueden utilizarse para favorecer el envejecimiento activo en sus tres vertientes: física, cognitiva y social. La arquitectura puede aportar algunas de las soluciones y contribuir para la mejora la vida en los centros residenciales para personas mayores.
Como suele decirse, la primera impresión es la que cuenta, y por ello uno de los elementos fundamentales a considerar arquitectónicamente desde el inicio del proyecto es el aspecto exterior del edificio. Tanto el uso de los materiales como la propia escala del edificio pueden evitar que el centro residencial transmita las negativas connotaciones institucionales.
Proyecto de Centro residencial para personas mayores en Pontevedra 2022. HABILITEC ARQUITECTURA
El aspecto interior es otro de los elementos que contribuirá decisivamente a generar un ambiente hogareño y amigable. La utilización de colores cálidos e iluminación natural, en la medida de lo posible, aportarán confort a nuestros mayores. También la elección de los diferentes materiales, con sus texturas y colores, puede ayudar a una mejor orientación de los residentes dentro del centro.
Para favorecer el envejecimiento activo en su vertiente física la organización del centro residencial es una de las claves del proyecto de arquitectura. Los recorridos deben ser cortos, agradables y variados, cubiertos o abiertos, con transiciones entre ellos, animando al residente, de este modo, a realizar actividad física de una forma indirecta. Al margen de éstos estudiados recorridos no deben olvidarse los espacios destinados expresamente para la actividad física, tanto en el interior como en las zonas exteriores.
La actividad cognitiva de los residentes se puede favorecer mediante la adecuación de las áreas para usos comunes o actividades compartidas, siendo la configuración del centro en unidades de convivencia una de las herramientas más eficaces para lograrlo. En este sentido la Xunta de Galicia ha dado un paso adelante el pasado año 2022 reconociendo los beneficios de la conviviencia en cuanto a la mejora de la autonomía personal y la promoción de la vida social activa en los centros de atención a personas mayores (Xunta de Galicia ORDEN de 10 de octubre de 2022 por la que se modifica la Orden de 18 de abril de 1996 por la que se desarrolla el Decreto 243/1995, de 28 de julio, en lo relativo a la regulación de las condiciones y requisitos específicos que deben cumplir los centros de atención a personas mayores).
Unidad convivencial. Centro residencial en Grazt. Austria
Promover la actividad social es por tanto otro de los elementos favorecedores para el envejecimiento activo en las residencias para personas mayores, y se relaciona estrechamente con los aspectos físicos y cognitivos. Por ello, se han de incluir también espacios adecuados para tales fines, como puedan ser salas polivalentes o zonas exteriores aptas para actividades comunitarias, tanto las del propio centro como las externas, en las que puedan participar además visitantes y familiares.
Ante éste cambio de paradigma del modelo residencial para las personas mayores, la arquitectura juega un papel principal en la calidad de vida de los residentes. Con el uso de las herramientas proyectuales adecuadas se pueden conseguir entornos amigables, hogareños y que a la vez promuevan el envejecimiento activo, contribuyendo a que la persona mayor, como usuaria de una residencia, pueda desarrollar su vida en un ambiente lo más favorable, activo y participativo posible.