de viaje como viajeros
Perú
La República Presidencialista Democrática de Perú, dividida en 25 regiones, es una antigua colonia española que alcanzó su independencia en 1821. Actualmente atraviesa una etapa de crecimiento económico, que fortalece el crecimiento de la naciente clase media del país.
Los apasionados de la cultura y la historia, sabrán encontrar en este antiguo país, vestigios históricos y muestras culturales, mucho más allá de la época de la colonia, en incluso cientos de años anteriores a la gran cultura incaica. Aquí encontrarán la mejor oportunidad de remontarse a épocas preincaicas, incaicas y coloniales, a través de los siglos de arte que se acumulan en sus sitios arqueológicos, en sus aldeas, y en sus pueblos y museos. Una exótica, fuerte y colorista naturaleza se encargará del resto para hacer que este bellísimo país, cautive a cuantos lo visitan.
Lima
Lima es el punto obligatorio de entrada a Perú, además de su capital. Su Casco Histórico, declarado en 1991 Patrimonio de la Humanidad, conserva intacto el opulento sabor colonial. Como capital del antiguo virreinato, concentra todos los movimientos arquitectónicos y artísticos que llegaban de la península. Un ejemplo de ello es la corriente artística que mezcla elementos del arte español con los del antiguo Imperio Inca, y que se puede ver aún hoy en los grandes centros del antiguo virreinato español. Más de 600 monumentos históricos de aquella época, componen su mapa arquitectónico, siendo su catedral gótico-isabelina uno de los ejemplos más destacados. No te pierdas su Plaza Mayor o Plaza de Armas, que, si puedes, deberás visitar a mediodía, cuando se hace el cambio de guardia; ni su original Circuito Mágico del Agua con sus trece fuentes danzantes; pasea con tu pareja por el Parque del Amor o llévatela de la mano al Puente de los Suspiros y por la noche no faltes al ambiente de Miraflores, el barrio más burgués de la capital, con una selecta oferta de cafés, restaurantes, bares, centros comerciales y discotecas. Y no olvides que, actualmente, una de las cocinas de moda en el mundo es la cocina peruana.
Cusco
El Cusco o en español Cuzco, es una ciudad del sureste del Perú ubicada en la vertiente oriental de la Cordillera de los Andes, en la cuenca del río Huatanay, y con una altitud de casi 3.400 metros sobre el nivel del mar. Antiguamente fue la capital del Imperio Inca y una de las ciudades más importantes del Virreinato del Perú, en cuya época, y en manos de los españoles, se engalanó de iglesias, palacios y plazas barrocas y neoclásicas, que es lo que hoy le convierten en el principal lugar turístico de Perú. Declarada Patrimonio de la Humanidad en 1983 por la Unesco, suele ser denominada, debido a la gran cantidad de monumentos que posee, como la "Roma de América".
Del centro histórico del Cusco y de todo su entorno, se desprende un halo mágico difícil de comparar. En el centro te cautivará su importante Plaza de Armas, donde se edificaron arcos de piedra y se erigieron las construcciones que hasta hoy la rodean, como la Catedral, las capillas de la Sagrada Familia y la del Triunfo, y la fascinante iglesia de la Compañía de Jesús. Y en el centro de la plazas, sobre una fuente, la imponente imagen de Pachacutec, el gran caudillo Inca. Esta plaza ha sido el escenario de diversos hechos importantes en la historia de la ciudad, como la primera proclamación de la independencia del Perú, por los hermanos Ángulo en 1814. Igualmente, la Plaza fue el escenario del magnicidio a manos de los conquistadores españoles de José Gabriel Túpac Amaru, Túpac Amaru II, considerado el primer gran caudillo de la resistencia andina a las Reformas Borbónicas. En sus alrededores, encontrarás cinco conjuntos arqueológicos de gran valor, como el de Sacsayhuaman, que abarca 33 sitios arqueológicos. Desde aquí podrás desplazarte a lugares increíble por el denominado Valle Sagrado de los Incas, o Valle del río Urubamba.
El sagrado valle de los incas
El Valle Sagrado de los Incas se extiende siguiendo el curso del río Urubamba, también llamado Vilcanota, desde La capital Inca del Cusco, hasta la maravillosa Ciudad Perdida de los Incas, Machu Pichu.
A solo 30 kilómetros de Cusco se halla el poblado de Pisac (Calca), donde cada domingo tiene lugar un mercado artesanal al que acuden todas las aldeas aledañas a vender sus mercancías y artesanías. Además, a las 10,30 de la mañana se celebra una misa quechua, a la que asisten los 17 varayocs (alcaldes) de las aldeas que forman el Valle. Y a solo 15 minutos, sobre las montañas, podrán visitar las fascinantes ruinas de la antigua ciudad Inca
Las Salineras de Maras, en uno de los lugares más increíbles de la Sudamérica andina, donde una actividad económica prehispánica viene siendo el sustento de sus pobladores; son 3.000 pozos de pocos metros cuadrados donde se deja evaporar el agua salada que emana de un riachuelo subterráneo para solidificar la sal.
El pueblo Inca de Ollantaytambo, es la mas antigua de las aldeas del Valle, que nunca ha dejado de estar habitada desde la época inca. Actualmente, es uno de los puntos donde sale el tren para ir hasta Aguas Calientes, el pueblo a los pies de Machu Picchu. Esta antigua población inca fue una de las más importantes del imperio y tuvo un papel clave en la resistencia frente a la conquista española. Por este motivo y por su privilegiada situación geográfica, sus ruinas son una visita más que interesante, sobresaliendo la fortaleza con el Templo del Sol, situado sobre una colina. Esta fortaleza tiene un héroe trágico unido a su historia: Manco Inca. Este valiente heredero de la estirpe de gobernantes incas, fue el líder de la rebelión contra los españoles y capitaneó la reconquista de las tierras del imperio de sus antepasados. Durante un tiempo, llegó a controlar Cuzco de nuevo y sus aliados estuvieron a punto de retomar Lima. Sin embargo, los refuerzos españoles venidos de Guatemala y algunas traiciones entre los suyos lo forzaron a retirarse a Ollantaytambo, después de su derrota en Sacsayhuamán.
Chinchero
Chinchero es conocida como la ciudad del Arco Iris, está situada a 28 km. al noroeste del Cusco, a 3160 msnm. Es quizás la población más típica del Valle Sagrado de los Incas, una ciudad netamente incaica que los conquistadores quisieron "civilizar" para implantar su cultura, pero nunca lo lograron totalmente. De hecho, aun actualmente, mas de la mitad de su población tiene dificultades para expresarse en español, haciéndolo habitualmente en quechua . En Chinchero el pasado persiste obstinadamente, como si el espíritu de una cultura milenaria se aferrara en este lugar, negándose a desaparecer. Los pobladores nativos, ataviados con coloridos trajes típicos, bajan de sus comunidades los domingos y se aglomeran en la plaza principal para intercambiar sus productos. Ver a todo este grupo de gente de raíces culturales profundas, ajenos a todo signo de modernidad, resulta todo un espectáculo.
En su concurrida y colorida feria dominical, se puede encontrar objetos de uso domestico, algunos verdaderamente antiguos como los famosos textiles de Chinchero. En este pueblo, con comunidades unidas se ha podido conservar un patrimonio vivo, inmaterial, de extraordinario valor, que se expresa tanto en la textilería como en las prácticas agrícolas y en una red de relaciones familiares y comunitarias.
Machu Pichu
Un imprescindible en Perú es Machu Picchu, Santuario Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad, y conocida como la Ciudad Perdida de los Incas. Machu Picchu es el nombre contemporáneo que se da a una llaqta incaica (antiguo poblado andino), construida a mediados del siglo XV en el promontorio rocoso que une las montañas Machu Picchu y Huayna Picchu, en la vertiente oriental de la cordillera Central, al sur del Perú y cuya plaza principal se halla a 2.490 metros sobre el nivel del mar. Aquí encontrarás, entre cumbres andinas y llanos amazónicos, 104 conjuntos arqueológicos y caminos incas, junto a miles de especies silvestres. En su interior viven llamas, nutrias, monos, pumas, osos hormigueros y perezosos, venados… así hasta 75 especies. Su flora obsequia al visitante con la orquídea Wakanki, que significa “Llorarás”, una de las 425 especies que adornan este santuario. Su espectacular paisaje lo determinan cerros y montañas de gran pendiente, laderas prácticamente verticales y vigorosos ríos sonoros.
A Machu Picchu puedes llegar tras recorrer a pie el fascinante Camino Inca, o en el tren “Hiram Bingham”, que une Cuzco con Machu Picchu, que camina paralelo al curso del río Urubamba, mientras atraviese su valle. La experiencia de recorrer las ruinas de la ciudadela, de subir hasta la cima del Huayna Picchu, o de llegar caminando hasta el Inti Punku o Puerta del Sol que daba entrada a la ciudadela, puede tener una recompensa muy gratificante si se complementa con una experiencia termal, en las pozas y piscinas cuyas aguas oscilan entre los 38º y los 46º. Los baños se encuentran al este de Aguas Calientes o Machu Pichu pueblo, entre el río Alccamayo y las montañas circundantes y les aseguro que el tramo hacia los baños es un sendero precioso, al que se accede cruzando puentes rústicos que transcurren entre una fascinante vegetación.
Arequipa y el cañón del Colca
Arequipa es la capital y mayor ciudad del Departamento de Arequipa, sede del Tribunal Constitucional y la «Capital Jurídica del Perú». También es conocida como la «Ciudad Blanca». Fue fundada el 15 de agosto de 1540, bajo la denominación de «Villa Hermosa de Nuestra Señora de la Asunta» en nombre del marqués don Francisco Pizarro. Actualmente cuenta con 1.280.000 habitantes siendo la segunda ciudad más poblada de Perú.
Desde tiempos coloniales, Arequipa destacó por sus numerosas iglesias, templos, monasterios y conventos, siendo la Catedral, situada en su preciosa Plaza de Armas, uno de sus ejemplos más representativos. Igualmente representativa es la Iglesia La Compañía, que es el más antiguo e importante testimonio de arquitectura religiosa con utilización del sillar (piedra blanca típica de Arequipa), y posee una rica ornamentación en su frontón de tipo plateresco mestizo. Las de San Agustín, Santo Domingo, San Francisco y la Tercera Orden, son otras de las más importantes representaciones del arte religioso.
Pero el mayor atractivo de esta zona geográfica es El Valle del Colca, uno de los mayores destinos turísticos del Perú, y el segundo cañón más profundo del mundo con 4.150 metros. En el Valle del Colca hay 14 pueblos escalonados a lo largo del valle, llenos de vida y colorido. En la Cruz del Cóndor el camino pasa al filo del cañón; experiencias de visitantes anteriores indican que el panorama que se observa desde allí es "espectacular", pues abajo discurre el río Colca a una profundidad de 1.200 metros, mientras que el murallón de al frente, llega a medir 3.100 metros de altura, viéndose en sus cumbres hielos perpetuos y más abajo los cóndores que vuelan majestuosos.
Lago Titicaca
El lago Titicaca, situado frente a la ciudad de Puno, es un cuerpo de agua ubicado en la meseta del Collao en los Andes Centrales a una altitud promedio de 3.812 metros sobre el nivel del mar, y compartido entre los territorios de Bolivia y Perú. Se trata del lago navegable más alto del mundo y ocupa el lugar 19º del mundo por superficie
Titicaca, es uno de los lagos más importantes de la mitología andina, siendo un lugar recomendable para admirar toda su belleza la “Casa del Cóndor” o Huajsapata, un mirador natural que ofrece un espectáculo inigualable.
Aquí encontraremos las conocidas como Islas Flotantes de los Urus, unas islas artificiales hechas de una especie de junco llamado totora, y habitadas por descendientes de la etnia Uru, cuya actividad principal es la pesca y la caza. Actualmente viven todavía más de 200 familias de uros, uno de los grupos étnicos más antiguos que poblaron la región. Estas islas se han convertido en uno de los lugares más demandados por los viajeros del mundo que llegan hasta aquí.
La enorme diversidad biológica del ámbito del lago, permite observar especies como el zambullidor del Titicaca y la rana gigante. También la isla de Taquile, declarada en 2005 por la Unesco Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, donde destaca su artesanía textil.