marketing inmobiliario
La importancia del encargo de venta en las operaciones inmobiliarias
Como negocio jurídico, un cliente vendedor puede contratar a un mediador que bajo unos criterios establecidos por ambas partes de obligado cumplimiento, estos actúen de forma honesta y profesional en ambos casos para llevar a un buen puerto la operación de compraventa.
Dependiendo del tipo de contrato y de esa relación contractual el éxito se dará en mayor medida al compromiso adquirido y a las condiciones pactadas entre las partes.
Por parte del mediador (Agencia o agente inmobiliario) debe asegurarse que su trabajo se cobre en caso de venta. En este caso siempre se recomienda trabajar como agente único y en exclusiva y dentro de esta exclusiva, exclusiva compartida.
Esta modalidad implantada en los mercados inmobiliarios más avanzados es la mejor opción para un cliente vendedor ya que permite al mediador confiar la labor de comercialización con garantía al profesional del cobro de honorarios. El cliente vendedor, deja en manos de su asesor el poder de negociar tanto con los particulares como de otros profesionales en su nombre. La multiexclusiva, permite al mediador potenciar el inmueble a través de publicaciones y el mailing a otras agencias.
Las agencias colaboradoras se suman a compartir con garantías de cobro ya que es un profesional el que hace las labores de negociación y es el garante de que la documentación está en regla y en caso de interés por la parte compradora asegura las cantidades monetarias depositadas.
Un error común de los propietarios es el encargo de venta con varios mediadores pensando que el éxito de la operación está en esa condición. Los verdaderos profesionales mediadores en esta modalidad no están cómodos por la poca garantía de representación. Es una locura pensar que un mediador llevará a un posible comprador a un inmueble que esté representado, anunciado o con carteles a la vista de otros profesionales y menos si está el del propio propietario.
El mayor número de operaciones es a través de operaciones inmobiliarias compartidas, donde el mediador que representa la propiedad ofrece a los otros agentes la misma y esa agencia trae el cliente comprador.
El mediador representante deberá disponer de la documentación necesaria para que la finca se venda cuanto antes y también los servicios que van incluidos en los precios de honorarios.
Los mediadores no cobran comisión, cobran honorarios por servicios inmobiliarios. Los mediadores no venden, venden los propietarios y en ese camino hacen mucho y haciéndolo bien consiguen de una forma eficaz y rápida beneficios para la parte vendedora y compradora.
Un gran error es contratar a los mediadores inadecuados, o un error común de los agentes es ser contratados bajo los criterios de precio del inmueble marcado por el deseo del propietario e incluso a este deseo los honorarios sumados, y probablemente bajo estas condiciones sea imposible la venta.
Si es propietario exija una valoración de mercado al mediador y si este no sabe, huya, no es un buen profesional. Esta profesión no solo es poner un anuncio en internet, es mucho más.
¡¡¡Huya. Huya y busque un buen mediador inmobiliario!!!