jardinería
En septiembre se celebra el 'Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono'
En septiembre de 1987 se ratificó el 'Protocolo de Montreal' y en el año `94 se proclamó desde la Asamblea General de las Naciones Unidas esta fecha, el 13 de Septiembre, como el 'Día Internacional para la Preservación de la Capa de Ozono'.
31 años más tarde sigue siendo una fecha recordatorio importante, con potencial de alarmarnos. Recordamos que la destrucción de la capa de ozono, el cambio climático, y la pérdida de biodiversidad son un solo problema.
A estas alturas ya sabemos todos lo importante que es esa “capa de ozono” para todas las formas de vida de nuestro planeta, incluso los humanos.
Lo que ya menos conocido es el hecho de que el ozono se genera a partir del oxígeno producido por las plantas, el fitoplancton y las bacterias fotosintéticas. Entre el 50-70% de este oxígeno fotosintético se genera en el océano, pero el plancton está reduciéndose debido al aumento de las temperaturas por culpa del incremento de las emisiones de gases provenientes del efecto invernadero.
Ahora lo importante: Perder capacidad fotosintética en el océano también significa perder la capacidad de absorber CO2, agravando aún más el problema. Por tanto, la radiación ultravioleta que la escasez de ozono no podría filtrar mataría las fuentes más importantes de producción de oxígeno, ozono y fijación de carbono, así lo escribe el científico y horticultor de Kew Gardens en Londrés, Carlos Magdalena.
Alarmante, claro que es alarmante. Intuimos graves problemas y cambios en la vida de nuestros hijos, nietos y bisnietos, sin ir más lejos.
La pregunta que propongo (y al mismo tiempo contesto) es la siguiente: ¿Qué es lo que podemos hacer nosotros?
Lo nuestro, lo de los miles de millones que somos, es simple. Reducir emisiones de CO2. Sí, tenemos que respirar, pero podemos:
- Usar menos el coche, mejor es compartirlo, o usar servicios de transportes públicos.
- Comer menos carne. EL gas metano y la propia respiración de tantos animales es un gran productor de CO2. Además, para grandes productores de la industria de la carne se tala grandes superficies de bosque tropical cada año, lo que resulta en la liberación de enormes cantidades de CO2 que estaban bien fijadas en el bosque.
- Tenemos que evitar los incendios. De nuestros bosques y en nuestro entorno.
- Los que tenemos fincas y jardines: No debemos quemar los rastrojos y/o restos de poda. Las llamas del fuego liberan el carbono a la atmósfera.
- Hacer más compostaje, o camas elevadas, con los restos de poda, las hojas de los árboles, las siegas del césped, incluso algunos restos de la cocina como las pozas de café y té, y las mondas de frutas, todo ello se transforma en un abono rico en nutrientes y el carbono de la materia orgánica queda fijado. Otro buen efecto colateral es que utilizando este abono ahorramos comprar abono químico para nuestras plantas.
- Para cortar el césped usa robots, o cortacéspedes con sistema de mulching, de esta forma el propio césped cortado tan fino permanece en el sitio, se descompone y sirve de nutriente para el césped, un círculo como en la naturaleza misma. Y el carbono del césped queda fijado.
- Plantar árboles, y cuidarlos. Los árboles son capaces de fijar mucho carbono de la atmosfera. Es por algo que en muchas zonas de la tierra el estado natural definitivo es el bosque.
- Comprar alimentos producidos más cercanos, así se evita emisiones por transporte.
- Demandar y construir casas y edificios mejora aislados y construidos con materiales lo más cercanos posibles. Eso es menos transporte, y menos combustible en calefacción.
- Reducir el consumo de plástico. Los supermercados ya nos obligan. Pero seguro que encontramos mucho más oportunidades para evitar la utilización de plástico en nuestras vidas.