Vivienda unifamiliar. A Guarda
ArquitectoXavier Pousa Arbones |
Fallo del jurado
Pola habilidosa resolución do programa nunha parcela de complicada topografía e morfoloxía, así como polo agradecido uso dos materiais e solución de fachada.
Memoria
La materialización de la vivienda SA ha sido fruto de conjugar las necesidades del cliente con los condicionantes del entorno y la parcela y la normativa urbanística del ayuntamiento.
Por una parte los clientes querían una programa de vivienda en planta baja compuesto por su habitación con baño propio, salón comedor, cocina y aseo. Completaba el programa dos habitaciones de uso eventual con baño común que podían estar situadas en la misma planta u otra diferente y un garaje amplio. Además querían mucha luz natural y que la madera tuviera un papel principal por sus cualidades estéticas, de confort y regulación térmica.
Por otra parte el entorno en el que se enclava la parcela es de tipo urbano formado por edificaciones de baja densidad que se van adaptando a la orografía del terreno caracterizado por una elevada pendiente que desciende hacia el mar. Es un entorno duro ya que a pesar de las inmejorables vistas al océano Atlántico, está muy expuesto y azotado por el mar y el viento.
La parcela, se sitúa en la esquina entre dos calles, que debido a la orografía del terreno, tienen una diferencia de cota entre ambas de casi cinco metros. El grueso de la parcela se desarrolla en una plataforma que se encuentra a medio camino entre las rasantes de ambas calles. Hacia la calle O Rosal, la rasante del terreno esta elevada casi tres metros respecto al vial.
La forma y el tamaño de la parcela también ha sido un hándicap importante, ya que tiene una forma irregular con una zona más ancha en su parte alta (oeste) y una tira alargada y estrecha en su parte más baja (este). Junto con estos condicionantes de parcela, los exigidos por la normativa urbanística (alineación de las dos calles en curva, cesión para ampliación de vial, retranqueos de 3 m a linderos, sólido capaz) hace que el volumen disponible para edificar se reduzca considerablemente.
Partiendo de todo ello, se ha optado por situar la vivienda en la parte ancha y alta de la parcela, para conseguir las mejores vistas. Para aprovechar todo el ancho disponible de la parcela, la vivienda se ha situado en la alineación de la calle, sin retranqueos, de forma que las fachadas hacen a la vez de cierre de la finca.
En cuanto a la configuración de la vivienda se ha jugado con los desniveles existentes entre las calles, para conseguir una vivienda con semisótano, planta baja y planta alta. Cada una de las plantas tiene una superficie diferente de forma que se retranquean unas respecto a las otras para adaptarse al desnivel del terreno, dando como resultado una volumetría fragmentada y escalonada que mantiene la escala del entorno.
Así mismo, esta volumetría enriquece la relación interior exterior, ya que aparecen una serie de espacios de estancia como terrazas y porches que potencian la relación con las vistas al mar y la parcela.
La vivienda se distribuye en planta semisótano, planta baja y planta primera. La planta semisótano se encuentra semienterrada, en ella se sitúan usos como el garaje, la sala de instalaciones, almacén y lavadero. El acceso a esta (fundamentalmente de tipo rodado) se realiza por la calle O Rosal, que es el punto más bajo de la parcela.
La planta baja, tiene acceso por la calle Irmáns Noia Xil, se aprovechan los tres metros de retranqueo de la vivienda con la parcela colindante para realizar el acceso a la vivienda. En esta planta se sitúan la cocina, un salón comedor, la habitación principal de la vivienda con baño completo y un aseo de uso general. La distribución de estas estancias es fruto de intentar aprovechar al máximo las vistas al mar y a su vez la relación con el espacio libre que queda en la parcela. De esta forma, todas las estancias a excepción de los baños, tienen vistas directas al mar, y el salón comedor además, se abre a la parcela a través de un porche.
En la planta primera se ubican las dos habitaciones de uso eventual y un baño. En este caso, también se han intentado potenciar las vistas, siendo el baño la única estancia que no tiene vistas. El retranqueo de esta planta respecto a la planta baja, genera una amplia terraza-solárium que permite tener una vista panorámica del entorno por encima de las construcciones próximas.
Los materiales empleados para la construcción de la vivienda son principalmente dos, hormigón y madera. El primero como elemento de zócalo, de aspecto pétreo, pesado, duro en contraposición al segundo caracterizado por ligereza, calidez, blando. Entre medias, la carpintería interior y remates metálicos realizados en aluminio anodizado color negro.
La dualidad hormigón-madera también se lleva al ámbito estructural. La planta semisótano realizada en hormigón armado actúa como basamento de la estructura más ligera realizada de manera semi industrial con paneles contralaminados CLT que conforma los volúmenes de planta baja y planta primera.
Todo la estructura y fachada de madera se conformó en piezas en una nave para luego transportarlos y montarlos in situ en un plazo de 3 semanas.
La fachada de la vivienda se resuelve con un solo sistema constructivo. Una fachada trasventilada de lamas de madera termotratada. El tratamiento termotratado le permite a la madera soportar las condiciones adversas del entorno en donde el viento y el agua de mar azotan duramente esta vivienda.
Los huecos de esta vivienda responden también al planteamiento estructural realizado con los paneles contralaminados. Se resuelven con carpintería de aluminio anodizado calor negro.
Interiormente se sigue la línea de la sencillez y pocos materiales. Se combina lo moderno del panel contralaminado visto en combinación con el blanco de las paredes y techos de cartón yeso y carpintería. El suelo inferior es de tabla ancha de castaño.
En resumen una vivienda sencilla, compacta, bien aprovechada, confortable con el lujo de disfrutar de las generosos vistas al océano Atlántico.